Somos especialistas en desarrollo,  no sólo trataremos aquello que puede presentar tu bebé como puede ser: dificultades con la succión o alimentación, torticolis, deformidades craneales, parálisis braquial obstétrica, displasia de cadera, etc.

También te acompañaremos en su neurodesarrollo para aportar el máximo a tu bebé, sin sobreestimular, porque las primeras etapas de tu bebé son determinantes en su desarrollo posterior.

Hay numerosos estudios que confirman que un desarrollo motor pobre en los primeros meses son determinantes en los problemas de aprendizaje, atención y comportamiento. Así que no esperes más y consúltanos tus dudas sobre el desarrollo de tu bebé.

Es importante entonces que tengamos en cuenta:

• Un bebé no es un adulto en pequeñito, es un ser humano en desarrollo!!
• Cada bebé tendrá una velocidad de desarrollo distinta, la edad se tomará como referencia.
• Necesita unos estímulos para poder madurar. No sólo crecen, también tiene que madurar.
• La genética es importante pero los estímulos, son en igual medida, fundamentales para un óptimo desarrollo.

¿Qué es necesario para un desarrollo motor fisiológico?

Desarrollo intrauterino

SNC sano

Motivación y estímulos

Libertad de movimientos

Información sensorial correcta

¿Cuándo se necesita ayuda profesional?

Los bebés sin daño neurológico también necesitan de fisioterapia de calidad.

Porque el desarrollo motor y postural pueden verse afectado por diversos motivos, no sólo por alteraciones en la estructura como en:

Tortícolis

Displasia de Caderas

Plagiocefalia o deformidades craneales

PBO

Entonces…

• Un bebé que sostiene la cabeza recién nacido, puede ser significativo de un exceso de tensión por un problema cervical.
• Irritabilidad, llanto, despertares constantes… puede ser indicativo de que está molesto, puede ser por problemas estructurales…
• Posición de la cabeza siempre hacia el mismo lado.
• Preferencia sobre un pecho. Puede ser dificultad en el cuello que no puede girar hacia el otro lado.
• Problemas de lactancia. Además del frenillo y la posición del bebé, para que haya una lactancia efectiva, el bebé tiene que poder posicionar la lengua y cerrar la boca haciendo un sellado para que pueda succionar. Y para eso intervienen muchas estructuras nerviosas y musculares que permiten este funcionamiento tan preciso de la boca.

• Bebé con un exceso de tono, muy rígido, o muy laxo.
• No responde a sonidos o no fija la mirada.
• Asimetrías en cara o cráneo.
• A los 9 meses no es capaz de voltearse en el suelo, no es capaz de girarse
  sobre su propio ombligo (o lo hace hacia un lado) o reptar.
• Lleva dos meses arrastrándose y no utiliza las piernas.
• Se arrastra con una pierna y con un brazo, manos bloqueadas y cerradas.
• No gatea o no comienza la bipedestación entre los 10-16 meses.

En cualquiera de estas situaciones sería recomendable valorar su estructura (columna, cadera, cráneo) y valorar su desarrollo postural y motor por si hay que intervenir y permitir que continúe su desarrollo de la forma más natural posible y en sus ritmos.

Un fisioterapeuta experto en Terapia Manual Pediátrica Integrativa (TMPI), valorará la maduración del sistema neurológico y podrá ayudar a través de una programación Neuro sensorio motora y por supuesto las estructuras implicadas en esa falta de desarrollo.

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