¿Sabías que el recien nacido es especialmente sensible en su regulación térmica?
Esto es así, entre otros motivos, porque tiene una gran superficie de piel y pocos mecanismos reguladores de temperatura por lo que pierden calor de forma rápida.
A las tres semanas de vida el bebé comienza a regular su temperatura corporal. Por esto es importante que use gorrito desde el nacimiento, ya que es a través de la cabeza por donde pierde más calor.
Pero cuidado…también hay que evitar abrigarlos demasiado ya que se puede producir un aumento de temperatura excesivo que llega a confundirse con la fiebre.
¿Cómo saber si nuestro bebé está correctamente abrigado?
Para saber si están abrigados podemos tocar su nuca. Ésta debe estar calentita pero no mojada – lo cual indicaría un exceso de calor – o fresquita – lo cual indicaría que tiene muy baja temperatura-.
Por otro lado, es normal que sus extremidades -manos y pies- se noten frías ya que su piel pierde mucho calor. En todo caso, esto no sería un indicativo de que necesite más ropa.
![](https://phiosfisioterapia.com/wp-content/uploads/2021/06/BEBÉ-ABRIGO-II-1024x683.jpg)
La importancia de la nariz del bebé
Los cornetes del bebé – pequeños huesos situados en el interior de las fosas nasales-
están menos vascularizados que en el adulto y su nariz tiene menos vellosidades.
Esto hace que la función nasal de calentar y humedecer el aire sea más limitada en el bebé, adaptándose mal a los cambios bruscos de temperatura. Por ello tampoco es bueno llevarlos siempre con mucha ropa ya que se produce irritación de la mucosa que puede llevar a un aumento excesivo de la generación de mocos.
Hay que recordar a este respecto, que en los bebés de menos de 6 meses su respiración es fundamentalmente nasonasal y necesitan tener esas naricillas bien despejadas.
¿Y tú? ¿Cómo abrigas a tu bebé? ¡Cuéntamelo en los comentarios! Te leo.
"En cada niño nace la humanidad."